Publicado el 28 de septiembre de 2023 a las 6:56 p.m. ET
BARCELONA, España – La policía española allanó el jueves las oficinas de la federación de fútbol del país como parte de una investigación sobre el pago de millones de dólares por parte del Barcelona durante varios años a un ex vicepresidente del comité de arbitraje español.
La Guardia Civil confirmó a Associated Press que su policía registró las oficinas del comité de árbitros en la sede de la federación cerca de Madrid. La policía dijo que no había practicado ninguna detención y que actuaba por orden del juez Joaquín Aguirre, que investiga el caso ante un juzgado de Barcelona.
En marzo, los fiscales estatales acusaron formalmente a Barcelona de corrupción en el deporte, gestión fraudulenta y falsificación de documentos comerciales. Los fiscales dijeron que el club pagó a José María Enríquez Negrera, un exárbitro que formó parte del panel de arbitraje de la federación de 1994 a 2018, 7,3 millones de euros (7,7 millones de dólares) de 2001 a 2018.
Las redadas se producen después de que un escándalo de discriminación sexual sacudiera a la federación después de que su expresidenta besara a una jugadora en los labios sin su consentimiento durante la ceremonia de entrega de premios de la Copa Mundial Femenina el mes pasado.
También el jueves, Aguirre añadió oficialmente una nueva acusación a la investigación, diciendo que había indicios de soborno entre Barcelona y Negrira. La acusación de soborno sustituye a la anterior acusación de corrupción en el deporte.
Los pagos fueron investigados inicialmente como parte de una investigación fiscal a una empresa dirigida por Niguerera.
Barcelona negó cualquier irregularidad o conflicto de intereses, diciendo que pagaba por informes técnicos de los árbitros pero nunca intentaba influir en sus decisiones en los partidos.
El técnico del Barcelona, Xavi Hernández, que jugó en el Barcelona de 1998 a 2015, reiteró este jueves su defensa del club.
«No tuve la menor impresión de que los árbitros nos favorecieran», dijo el excentrocampista español.
Durante los años investigados, el Barcelona ganó nueve títulos de La Liga y seis de la Copa del Rey.
Los cargos van contra el Barcelona, Negrira, los expresidentes del Barcelona Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu, y los exdirectivos del Barcelona Oscar Grau y Albert Soler.
Negrera no dirigió ni un solo partido durante los años que estuvo pagado por el Barcelona. Sus funciones eran administrativas. Pero se dice que influyó en las decisiones tomadas por los árbitros de Primera División o divisiones inferiores.
Obtener informes sobre los árbitros es una práctica habitual en España, y los clubes pueden pagar a otras empresas o prepararlos internamente, como está haciendo ahora el Barcelona. Pero pagar grandes sumas de dinero a alguien implicado en la gestión de los gobernadores españoles por sus informes no es una práctica normal.
Los árbitros españoles defendieron su honor en marzo, diciendo que su integridad no debería estar en duda debido al escándalo.
En España, un juez de instrucción lleva a cabo una investigación preliminar sobre un posible delito para determinar si debe ser juzgado, que luego es supervisada por otro juez.
El caso también llamó la atención de la UEFA, que supervisa el fútbol europeo y gestiona la lucrativa Liga de Campeones.
Las reglas de competición de la UEFA exigen que los equipos sean excluidos de una temporada de competición europea si participan en el amaño de cualquier partido nacional o internacional. No han surgido acusaciones de partidos amañados o árbitros específicos afectados desde que la UEFA abrió su investigación sobre el caso en marzo pasado.
En julio, la UEFA permitió que el Barcelona jugara la Liga de Campeones esta temporada, al tiempo que advirtió que monitorearía si había más evidencia de posibles irregularidades.
«El caso Neguerera nos está causando mucho daño», dijo el jueves el presidente de la Liga española, Javier Tebas.
«El simple hecho de que alguien intente influir (en el árbitro) está penado por la ley española», dijo Tebas. «La investigación está en curso, pero que el club pague a Negrira es una infracción muy grave».
En un comunicado emitido el jueves por la noche, la Asociación de Fútbol dijo que la redada estaba vinculada a una investigación sobre una gestión anterior y dijo que continuaría cooperando con las autoridades.
The accusations are against Barcelona, Negreira, former Barcelona presidents Sandro Rosell and Josep Maria Bartomeu, and former Barcelona executives Oscar Grau and Albert Soler.
Negreira did not referee games during the years he was paid by Barcelona. His duties were administrative. But he reportedly did influence decisions on which referees worked in the topflight or lower divisions.
Getting reports on referees is common practice in Spain and clubs can pay other companies or have them prepared internally, as Barcelona does now. But paying large amounts of money to a person involved in the running of Spain's referees for reports is not a normal practice.
Spain's referees defended their honor in March, saying that their honesty should not be put in doubt by the scandal.
In Spain, an investigative judge carries out the initial investigation into a possible crime to determine if it should go to trial, which a different judge then oversees.
The case has also drawn the attention of UEFA, which oversees European soccer and runs the lucrative Champions League.
UEFA competition rules require teams to be removed from one season of European competition if they are implicated in fixing any domestic or international game. No allegations of any specific fixed games or referees who were influenced have emerged since UEFA opened its investigation into the case in March.
In July, UEFA cleared Barcelona to play in this season's Champions League, while also warning that it would be watching to see if more evidence of potential wrongdoing emerged.
Spanish league president Javier Tebas said Thursday that "the `Negreira case' is causing us a lot of damage."
"The mere fact that someone would try to influence (a referee) is punishable under Spanish law," Tebas said. "The investigation is ongoing, but a club paying Negreira is a very serious irregularity."
In a statement late Thursday, the soccer federation said the raid was linked to an investigation of a previous administration and said it will continue to collaborate with authorities.
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